‘Short Term 12’, ejemplo del mejor cine independiente norteamericano

|

short_cab


Del recelo a la confianza. De la marginalidad a la adoración. De subgénero minoritario a verdadera alternativa al mainstream. El cine indie norteamericano se ha convertido para muchos en sello de calidad, y cada vez somos más los que recorremos expectantes las listas de próximos estrenos en busca de títulos inscritos en dicha vertiente. En esta ocasión es Destin Cretton ('I Am Not A Hipster', 2012) quien dirige la cinta sobre su propio guión.


‘Short Term 12’ (aquí traducida ‘Las Vidas de Grace’) es el nombre del centro de acogida para adolescentes desfavorecidos donde Grace (Brie Larson) trabaja como supervisora junto a su pareja, Mason (John Gallagher Jr.). El film comienza con un plano general del centro, imagen intercalada más adelante en varias ocasiones. Una imagen estática y en apariencia insustancial, pero que representa la esencia del film: un edificio corriente, como la existencia de cualquier persona mirada de soslayo, pero en cuyo interior la vida rebosa, con traumas, tensiones, alegrías y ratos muertos. Como la existencia de cualquiera.


‘Short Term 12’ habla de la necesidad de aprender a canalizar el amor, de lo cómodo que resulta dejarse llevar por la inercia y amar e interesarnos así solo por aquello que no puede hacernos daño. De cómo esa inercia mantiene aletargado gran parte de nuestro potencial humano. Del esfuerzo que requiere salir de uno mismo para preocuparse por los demás, se preocupen o no ellos por nosotros a priori. Habla del valor inconmensurable de la empatía. De cómo sin la relación con los otros y la comprensión mutua estamos perdidos. Todo esto suena a más de lo mismo, así que ¿por qué esta película merece ser apartada del gran saco? Por su intensidad, sensibilidad y perspicacia en la narración.


La secuencia que sigue al citado plano inicial muestra a Mason contando a Nate (Rami Malek), un nuevo cuidador en su primer día de trabajo, una graciosa anécdota sucedida con uno de los antiguos chicos del centro. Grace complementa el relato con breves comentarios de fondo. El relato vuelve a operar como símbolo de lo que vendrá: una historia en apariencia inocente, una persecución rutinaria en la que pesa más el trayecto en sí —repleto de violencia, compromiso, comicidad y escatología— que el desenlace. Como en la existencia de cualquiera. El film es una persecución permanente y colectiva, en la que los protagonistas se buscan unos a otros con el fin de comprender las emociones propias y ajenas. Si hay una palabra que defina la temática de ‘Short Term 12’ es convivencia, en el sentido más hondo y trascendente del término.


Todos los personajes, sin excepción, poseen y transmiten una vasta e íntima personalidad, dejan traslucir su universo propio: estamos frente a auténticos seres humanos, a años luz de arquetipos o representaciones sesgadas. Y lo más importante: conocemos quiénes son a través de su trato con el otro —y aquí es preciso destacar el labrado lenguaje cinematográfico con que es plasmada cada escena, desde los planos cortos hasta los conjuntos, pasando por los generales como el de apertura—. Asimismo, la banda sonora y la fotografía trabajan en la misma dirección, enfatizando elocuentemente el estado emocional de los personajes. Corren a cargo de Joel P. West y Brett Pawlak respectivamente, en quienes Cretton ya confió para su ópera prima.


Si-te-gustó-te-gustará: ‘Martha Marcy May Marlene’ (Sean Durkin, 2012).


Trailer:


      

Sin Comentarios

Escribe tu comentario



No está permitido verter comentarios contrarios a las leyes españolas o injuriantes.

Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.