'Crónicas de la Mafia' desvela verdades incómodas
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Hay verdades incómodas que cierta
gente no quiere que se proclamen al ámbito público o salgan a la luz. Aunque en
el caso particular al que nos referimos, dichas verdades ya se han reflejado de
antemano en un libro escrito por el periodista vasco Iñigo Domínguez: ‘Crónicas
de la Mafia’, un análisis de la organización y presencia de la Mafia siciliana
en los distintos ámbitos de la vida pública de Italia, donde la carrera
política de Silvio Berlusconi y su relación con la Cosa Nostra está en el punto de mira.
Por ello, y por razones evidenciadas
que por protocolo no se reconocen ante los medios, el Instituto Cervantes con
sede en la ciudad de Roma ha vetado la presentación de ‘Crónicas de la Mafia’
alegando “problemas de agenda y programación”, según su director Sergio
Rodríguez. Mientras, el propio Domínguez, reconoce que la decisión de que su
libro no sea presentado oficialmente es “por si molesta a alguien en Italia”.
Un secreto a voces
En verdad, la presencia de la mafia
en, prácticamente, toda la evolución de Italia es bien conocida por los
ciudadanos de a pie, según Domínguez, y por ello, genera una serie de apatía
colectiva contra una red que tiene demasiados hilos para ser desmembrada.
Cuando el periodista y autor del libro comenzó a trabajar como corresponsal del
periódico bilbaíno ‘El Correo’ en Roma, la palabra ‘mafia’ era la primera que
aparecía en las agencias de información y la que más resultados daba. Sólo era
cuestión de ir atando cabos para dar con la cronología, la evolución y la
inserción total de la mafia en todos los recovecos del país.
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La falta de seguridad en el Estado
borbónico obligó a los terratenientes a contratar a matones para proteger las
propiedades. Sin embargo, estos matones comenzaron a ser un peligro añadido a
la integridad de los más apoderados, por lo que éstos comenzaron a pagarles
para garantizar su propia seguridad. Poco a poco la mafia se constituyó como un
núcleo organizado peligroso que empezó a ganar dinero con el despliegue
económico hasta hacerse con la columna vertebral de Italia.
Su presencia, por tanto, es bien conocida
como decíamos anteriormente. La mafia ha matado en sólo dos años a más personas
que otras organizaciones criminales de Europa en 40 años. Sin embargo, a
diferencia de otros países que sufren la sombra del terrorismo, las víctimas
apenas tienen visibilidad social en Italia, ni tampoco la reclaman por miedo.
La polémica: Berlusconi y la mafia
Uno de los ejemplos concretos donde
se puede ejemplificar el modus operandi
de la mafia con respecto a su implicación en la política del país es el del
empresario Silvio Berlusconi. El polémico ex primer ministro italiano surgió de
la nada como por arte de magia. Pasó de ser un joven licenciado en derecho que
vendía aspiradoras y cantaba en cruceros a un poderoso empresario que se
iniciaba en el negocio del ladrillo con la construcción de numerosos inmuebles.
El respaldo económico lo obtuvo, en un principio, gracias al banco presidido
por su padre, aunque después se descubrió que la entidad bancaria estaba en
manos de la Mafia.
A partir de ahí han sido numerosas las
evidencias implícitas, contradictoriamente, que han relacionado a Berlusconi
con la red criminal más temida de Italia, aunque nunca han sido condenadas por
la ley. Berlusconi siempre ha tratado de silenciar los movimientos de sus
activos en cuentas de Suiza e Italia, así como, las causas de su ascenso en política
y el origen de toda su fortuna.
Realidad y ficción
Extraoficialmente se podría suponer
que estas son, mayoritariamente las razones en las que se basa el Instituto
Cervantes para vetar la presentación del libro. Una recopilación de datos que,
además de contar con 22 capítulos que relatan diversos episodios de la historia
de la Mafia siciliana, también contiene una filmografía de 250 películas
comentadas en las que se analiza la aparición y evolución de la figura del
‘gánster’.
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