¿Tropico de Lana Del Rey, una historia de Redención?
Lana del Rey ha estado rodeada de controversia desde el
inicio de su carrera con ese nombre. Se la ha tachado de antifeminista,
producto de marketing y muchas otras cosas. Sin embargo algo hay en sus
trabajos, para los que se rodea de profesionales como Bobby Womack, que encandila
al público. De momento, Lana resiste.
Para
rodar Tropico Lana ha contado con el
director Anthony Mandler. Tras su primer disco BORN TO DIE, en Tropico vemos una percepción que ya asomaba tímidamente en las letras de
National Anthem, Carmen o Videogames: la Cara B de una sociedad bipolar.
Además
de las canciones, que impregnan la atmósfera de desamor y melancolía se
vislumbra una crítica a la sociedad, al American way of life, a las promesas incumplidas,
a los fracasos que no son responsabilidades individuales. Los ambientes del
video son al principio paradisiaco y fantástico más tarde sórdidos y oscuros. Elvis y
Marylin, personificaciones del American dream y de su reverso,
aparecen en los primeros minutos, en el Paraíso perdido.
La segunda parte, una dosis
de locura, verdad y melancolía, transcurre en una
esquizofrénica Los Ángeles. Al final, tras unas cuantas experiencias con
la realidad más cruda, Lana y su compañero (Shaun Ross), primero en el
paraíso y luego en la sórdida Los
Ángeles, terminan por encontrar la redención.
Tal
y como está narrada la redención, ésta no resulta muy creíble. Como decía Joan
Didion en Los que sueñan el sueño Dorado,
mostrando la cara B de un país tan complejo como Estado Unidos, en el que
supuestamente todo es posible: «En la
tierra dorada el futuro siempre es atractivo, porque nadie recuerda el pasado.»
Si
te gusta la música de Lana del Rey y la quieres ver con otras reflexiones de fondo, no te lo
pierdas. Por otro lado si no te gustó su primer disco no te aconsejo Tropico, un
producto para Lanistas convencidos.
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