Velázquez, el pintor de la corte

El Museo del Prado dedica una nueva exposición temporal a uno de sus mayores pilares. ‘Velázquez y la familia de Felipe IV’ es el nombre de esta muestra que se podrá visitar hasta el 9 de febrero.

Una treintena de obras que nos acercan a la etapa de Velázquez como retratista de la corte y la de sus sucesores Juan Bautista Martínez del Mazo y Juan Carreño, a la vez, permitirá conocer a la familia de este monarca, gran amante de la cultura y mecenas del pintor sevillano.

El punto de referencia es el archiconocido cuadro de ‘Las Meninas’, que tanto interés ha despertado entre pintores posteriores a Velázquez como Picasso, quien hizo un particular estudio a través de 58 cuadros.

La exposición abarca desde la entrada de Mariana de Austria en Madrid como nueva reina, a finales de 1949, hasta su retiro en Toledo en 1677, después de haber dado a luz a un príncipe, haber enviudado y ostentado la regencia durante 10 años. A su llegada a Madrid, Velázquez se encontraba en Roma, donde realizó una docena de retratos a la corte papal de los que se podrá disfrutar de cuatro.

El núcleo de la muestra está compuesto por once retratos reales pintados por Velázquez en Madrid desde su vuelta de Roma hasta su muerte en 1660. Destaca especialmente ‘Las Meninas’ que suponen una reivindicación del género del retrato con especial protagonismo del mundo femenino e infantil y se pintaron en un momento en el que la cultura cortesana española atravesaba uno de sus momentos más creativos, con literatos como Pedro Calderón y Antonio Solís. Es entonces cuando la llegada de una nueva reina y el nacimiento de nuevos infantes y príncipes aumenta la producción de retratos y obliga a la puesta en marcha de un activo taller.

Finalmente, la muestra se centra en el retrato cortesano posterior de Velázquez, gracias a la obra de Martínez del Mazo y Juan Carreño, quienes, partiendo de soluciones del sevillano, supieron renovar su iconografía en una dirección más barroca. En este sentido, destaca la incorporación de los espacios palaciegos a los retratos, escenificando el equilibrio de fuerzas entre los últimos representantes de la Casa de Austria.

Un pintor desconocido

Tres siglos y medio después, la obra de Velázquez ha despertado el interés de críticos y especialistas de arte de todas las nacionalidades con el objetivo de descubrir las inquietudes, evolución y técnica del artista. Sin embargo, la carencia de documentos personales impiden que se pueda escribir una biografía del pintor.

Hasta ahora. Partiendo de documentos aparecidos gracias a investigaciones, coloquios y simposios celebrados con motivo del cuarto centenario del nacimiento del pintor, el hispanista Bartolomé Bennassar ha logrado trazar un itinerario vital del que Manet calificó como “pintor de los pintores”.